Hoy cumplo un año más, y ya van 56. Si echo la vista atrás creo que he podido disfrutar de una vida plena en la que se han ido alternando éxitos y fracasos, alegrías y tristezas, dolor y placer, casi a partes iguales, lo cual me lleva a entender que ha sido, ante todo, una vida auténtica, ni más ni menos como la de la mayoría.
Sin embargo, hoy tengo que exponer un pequeño matiz: este año apenas lo estoy usando, hay semanas que las he pasado entre el silencio sepulcral del miedo y la mimética soledad de la incertidumbre. El paisaje de mis ojos se ha empequeñecido hasta convertirse en un ovillo de diminutas fibras clandestinas, un minúsculo ojo de buey como el de los herméticos camarotes de los barcos.
Por eso ruego, a quien corresponda, que este año me lo cuenten por menos. Una rebaja razonable a tenor de los días no gastados. Si admiten mi propuesta haganmela llegar lo antes posible. Yo les enviaré, contra reembolso y sin remitente, todas aquellas horas que no me sirvieron para nada.
Indudablemente este año quedará grabado en la escritura de todas. Un año acompañada en el confinamiento por el grupo de estudiantes de escritura creativa de Torrevieja a los que has abierto los ojos a nuevos universo creados por tus palabras escritas y dichas; Llenas de la paciencia de la bondad y del entusiasmo de la creatividad.
Nos has permitido continúar creciendo con la madurez que te confiere tu experiencia de actriz-poetisa y compartir tu cumpleaños. Muchas Gracias.
Mil gracias Mari Carmen. Un beso muy grande!!