Es tan absurdo, tan denigrante…

es tan necesario necesitarte así,

en la planicie de los días laborables

cuando el tiempo se detiene, rutinario,

en la estática aventura de la vida.

Y descolgar el teléfono

y decir: «te quiero»,

y que sea cierto.

«La Revolución del Llanto» Ediciones Torremozas