Bienvenidos al hogar de mi alma

Supervivir, sobrevivir y no morir en el intento


Hoy no me han declarado una enfermedad terminal.
Tampoco me apetece suicidarme.
Mi nivel emocional fluctúa, como siempre, y hay ratos que me siento eufórica y, otros, como una malva.
No me apetece ser española, ni europea, ni siquiera terráquea.
Pero me siento feliz.
O no.
En la línea imaginaria de la mitad de mi vida
estoy más perdida que nunca.
He llegado a la cumbre de la sin razón.
Yo tampoco, si pudiera,
hubiera elegido el olvido de los monos.
Retomo el vientre.
Que os engañen a otros.

3 comentarios

  1. Angels

    Qué bonito lo de madre en prácticas! Y qué alegría encontrarte aquí. Muchos besos, vecina!!

    • Sacra Leal

      Graciasssss!!! Besos grandes siempre!!!

    • Sacra Leal

      Gracias, guapa!!!
      Todo un honor y un placer contar contigo.
      Besazos!!!

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